Durante más de seis décadas, Fred Perry sigue siendo una de las pocas marcas que tiene un producto verdaderamente icónico: la camisa Fred Perry. Un logotipo reconocible al instante: la corona de laurel. Herencia auténtica, dentro de la historia del deporte y la música. Y seguidores tribales: los aficionados de Fred Perry siguen siendo tan dedicados que los tatuajes de Laurel Wreath se han convertido en parte de nuestra cultura.
En 1933 Fred Perry ayudó a Gran Bretaña a ganar la Copa Davis por primera vez en 21 años y ganó el Campeonato de Estados Unidos. En dos años se convirtió en el primer británico en ganar el título de individuales de Wimbledon en 25 años y en el primer jugador en la historia en ganar los cuatro 'slams', luego ganó Wimbledon tres años seguidos, cada final en sets seguidos. Nació un héroe.
Fred Perry provenía de la clase trabajadora y su enfoque decidido de su carrera en el tenis no fue bien recibido en ciertos escalones del juego amateur. Fred fue infamemente desairado por un miembro del comité cuando venció al australiano Jack Crawford para ganar su primer título de Wimbledon "El mejor hombre no ganó". El rebelde con causa.
Fred residió más tarde en el Beverly Hills Tennis Club. Dio lecciones a estrellas como Charlie Chaplin y los hermanos Marx, entre otros, mientras se establecía en el circuito de fiestas de Hollywood. Románticamente, Fred tampoco se quedó atrás, casándose cuatro veces, cada vez con una actriz o modelo antes de establecerse.
"Nunca me ha preocupado admitir que mi nombre es más conocido en todo el mundo, no por ganar Wimbledon tres veces, sino por las camisetas y la ropa deportiva de Fred Perry".
La corona de laurel ha adornado la ropa de Fred Perry desde sus inicios en los años 50. Fred Perry se ha convertido en sinónimo de deportes y música y tiene un carácter británico innato que ha trascendido tanto el tiempo como la nacionalidad.
Fred Perry ha sido adoptado por personas que quieren asociarse con la historia de las marcas, firmemente arraigada en la contracultura de los años 50, el surgimiento del movimiento mod, subculturas de casuals, punk, northern soul, Perry boys, rude boys, skinheads, suedeheads, con Brit Pop, música urbana británica, estrellas del deporte y presidentes estadounidenses por igual.
La corona de laurel se usa hoy como una insignia de honor, adoptada por personas que desean asociarse con la marca y desvincularse del mainstream.
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